¿Regresó?

Nunca había dejado tanto tiempo sin escribir, sin publicar en mi blog.

Este 20 de febrero se cumple un año que pedí formalmente la mano de mi esposa, como se debe de hacer. Durante este tiempo he pasado momentos de grandisíma felicidad, me case, me regalaron un IPAD, concebí a mi hijo y me fuí de luna de miel, el orden en el que se escriben no necesariamente es en que las cosas sucedieron.

Creo que es momento de volver a expresarme, de volver a decir todas las cosas que veo. Me gusta escribir, esta plataforma siempre me proporciono la dosis sana de megalomanía que necesitamos, el drama que acompaña a las redes sociales no es lo mío. Escribir sobre la moral y el deber ser puede ser un poco aburrido y la falta de predicar con ejemplo puede hacer las palabras. Últimamente mi cerebro ha fluido con gran cantidad de ideas, esperemos que salgan todas y aunque sea una se convierta en algo real.

¿Cuando volveré a escribir?

No lo sé

Les dejo una foto, para el desenpance